Al lado del
Palacio se levanta la sacra Capilla Funeraria del Salvador. Sin duda
es el templo más ambicioso de toda la arquitectura del siglo XVI. Se
trata del panteón que mandó construir en su ciudad natal, el ya
mencionado Francisco de los Cobos. Su carácter funerario lo
descubrieron en su planta, una cabecera circular cubierta por cúpula,
que sigue el modelo clásico del Panteón de Roma. La fachada
principal, fue realizada por el gran escultor francés, Esteban
Jamete. La impotente portada sigue una estructura de gran arco de
triunfo.
Las portadas
laterales, fueron diseñadas por Valdevira. En el interior hay una
grandiosa reja, atribuida a Villalpando, que separa la cabecera
circular, donde está la cripta. Destaca también el retablo del
Altar Mayor, con una impresionante escultura. Finalmente la
Sacristía, que también fue diseño de Valdevira, con una original
portada en esquina y una magnífica decoración escultórica.
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